Septiembre en Europa. Entrega 1: Aerolíneas Argentinas vs Lufthansa
por Fodor Lobson
Barcelona me ha recibido con lluvia, lo cual invita a sentarse frente a la compu, con un café bien cargado, y ponerse a postear. La lluvia y también el hecho de disfrutar de la tranquilidad, y la conexión a internet gratis, de la casa paterna. Tengan en cuenta que durante los días pasados en Munich, el trabajo y los 6 euros por hora que costaba la conexión a internet en el hotel, no invitaban precisamente a sentarse a divagar al teclado.
Tampoco voy ahora a escribir un post quilométrico, de esos que dan pereza sólo con verlos en el Reader, mejor lo fracciono en paquetes menores.
La primera entrega está dedicada, cómo no, a Aerolíneas Argentinas.
Mi ruta de viaje era Mendoza-Buenos Aires-Madrid con AA y después Madrid-Munich con Lufthansa. La calidad del servicio en Aerolíneas nunca fue buena; ahora todavía es peor. En lugar de darte a elegir entre dos tipos de cena caliente, malos, pero dos, ahora directamente te enchufan una bandejita de pasta con queso, en la que la pasta y el queso más que pegados están fundidos con el aluminio de su contenedor. Un asco. En cuanto al entretenimiento a bordo… el sonido de la película que pasaron (en la pantalla pedorra comunitaria, esto no es LAN) era inaudible durante los primeros 20 minutos. La atención de las azafatas…. Bah mejor ni entremos ahí.
Todo esto acentuó todavía más, por agravio comparativo, la calidad de Lufthansa. En el vuelo Madrid – Munich, de poco más de dos horas de duración, nos sirvieron una comida infinitamente mejor, nos ofrecieron bebidas en repetidas ocasiones, y todo eso, si no con una sonrisa (los músculos faciales de los alemanes no están genéticamente diseñados para sonreír), sí con amabilidad y educación. Un lujo.
Claro que todo mi amor por Lufthansa se esfumó cuando en la retirada del equipaje, salieron todas las valijas, menos la mía.
Continuará
4 comentarios:
Aerolíneas apesta, pero, al menos hasta ahora, nunca me perdieron el equipaje!
Demoras, comidas impresentables, mala onda, valijas rotas: sí, siempre.
LAN es lo máximo! una amiga se olvidó el ipod dentro de la funda del asiento...y se lo devolvieron!
No conozco tu nacionalidad, Fodor, pero vale la pena hacer algo de memoria para saber dónde está uno parado. Si aerolíneas llegó a este nivel es, básicamente, a casi dos décadas de gerenciamiento extranjero: más específicamente español. En 1988, AR (AA es el código de American Airlines) era la compañía nro. 29 en el ranking de la IATA. Por supuesto que la depredación hispana se vio apoyada por la complicidad de una buena cantidad de argentinos y el silencio de la gran mayoría. Así están las cosas hoy, pero como estamos en el fondo, mucho peor no podemos estar y como dice el poeta: sólo cabe ir mejorando.
Regina,
sí, Lan es lo +
A mí AA me ha perdido el equipaje dos veces, pero bueno, yo soy medio yeta con esto... casi le diría que es más culpa de mi mal karma que de las compañías aereas
Alejo,
soy catalán (no español) lo cual tampoco me salva de nada, porque si no me equivoco el grupo Marsans es de origen catalán también. Estoy completamente de acuerdo con que independientemente del estado en el que estuviera AA antes de su privatización, en manos extranjeras terminaron de hundir a la compañía. Claro que cuando la vendieron ya se lo deberían haber imaginado, puesto que la pusieron en manos de una compañía que cubría exactamente las mismas rutas que AA, es decir, a la competencia. Lógicamente, la absorvieron y la hundieron. La única forma de salvarla en una privatización hubiera sido venderla a una compañía que cubriera rutas complementarias a las que tenía AA. Algo así como lo que están haciendo ahora con esta fusión de LAN y TAM, que se complementan para convertirse en una compañía más grande y más fuerte.
No excuso a los que la compraron, pero definitivamente los que la vendieron no estaban en absoluto libres de pecado.
*absorBieron. Lapsus tipae
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